La práctica de la espeleo sostenible

Nuestro paso por las cuevas produce un impacto. Es inevitable. Cada cavidad evoluciona como un ecosistema prácticamente cerrado, y por tanto, muy sensible ante cualquier variación. Esto hace que cada cueva desarrolle características únicas y propias donde cualquier variación, por pequeña que parezca, puede alterar el equilibrio cavernícola de forma irreversible, e incluso hacer desaparecer especies únicas, que en ocasiones ni siquiera nos son conocidas.

Como precio por su exploración debemos asumir cierto impacto. Sin embargo, no podemos permitirnos alterarlo más de lo necesario. Y, por desgracia, a veces lo hacemos: sin malicia, cierto; pero sin reflexionar.

Por ello, desde la comisión del karst que se creó en el seno de la UEV queremos concienciar y animar a reducir en todo lo posible los daños a nuestro paso por las cavidades. Para ello, os lanzamos unas propuestas de buenas costumbres para practicar una espeleología más sostenible.

Nuestro lema: «EN LAS CUEVAS Y EN EL KARST, NO DEJES NINGÚN RASTRO». El artículo completo AQUÍ

Y para ello, elaboramos seis directrices que se concretan en una serie de medidas y propuestas:

1. Evita en la medida de lo posible que tu exploración o visita deteriore la cavidad

Disfruta de la espeleo en todas sus facetas, no sólo en la deportiva. En las exploraciones, muévete con mayor lentitud. Con ello, no sólo serás más cuidadoso y reducirás las probabilidades de accidentarte o causar daños al medio, sino que también conseguirás una mejor visión de la zona, lo cual es muy útil para trabajos posteriores como fotografía, instalación o topografía.

Planifica tu visita

  •  Cuando prepares una exploración, integra en la toma de la decisión los impactos que esa salida puede ocasionar como un factor más, del mismo modo que lo haces con la meteorología, el material necesario….
  •  En la toma de decisiones, ten buen criterio: diferencia entre las afecciones más graves y las menos, así como en las consecuencias de su impacto. Los valores en juego son muchos: calidad del aire y ruido; relieve y geodinámica; suelos; residuos; drenaje, cauces y aguas subterráneas; fauna; recursos estéticos; aspectos sociales; patrimonio cultural…
  •  Recaba los permisos precisos, respeta los cerramientos: algunas cuevas permanecen cerradas, permanente o temporalmente, para la preservación de su patrimonio geológico, histórico o biológico, por peligro de inundaciones, sobrevisitas no controladas u otros motivos dirigidos a su protección.
  • El grupo ideal es de 4-6. Los grupos de más de seis personas son muy impactantes para el medio.

La protección del medio empieza por uno mismo

  • Procura moverte sin producir impactos innecesarios. Si procuras economizar energía, te mantendrás más descansado, y progresarás con más seguridad y de forma menos impactante. Mejora tu comodidad sin comprometer la seguridad. Cuanto más depurada sea tu técnica, tu progresión será más eficiente, más segura y menos destructiva.
  •  Mantente en forma y conoce tus limitaciones. No te sobreesfuerces, bebe e hidrátate: un espeleólogo cansado es más torpe, destructor y propenso a sufrir accidentes.
  •  Equípate de acuerdo a las condiciones y dificultad de la cavidad.
  •  Sin descuidar la seguridad, reduce el equipo superfluo, lo que te ayudará a moverte con mayor agilidad y ligereza.

Muévete con cuidado

  • Sigue los caminos ya hechos: que haya sólo un camino. Si es posible, intenta no moverte por terrenos inalterados.
  • Transita por los suelos más duros. Así evitarás afectar el paisaje y no compactarás el sustrato, lo cual daña a los animales que viven en los intersticios del suelo.
  • Presta atención en tus movimientos para no romper, quemar o manchar innecesariamente formaciones, paredes…. Vigila también dónde te apoyas.
  • Desplázate despacio y tranquilo; además, andar rápido puede levantar polvo que luego se deposita en las formaciones en crecimiento, alterándolas.
  • Evita alterar depósitos sedimentarios.

Utiliza el sentido común

  • Recuerda que el karst no depura las aguas; sólo diluye los contaminantes en el acuífero. No eches nada al río.
  • Sé especialmente cuidadoso en las zonas prístinas o vírgenes: procura dejarlo lo más próximo posible a como lo encontraste.
  • Prima los daños temporales a los permanentes; los reversibles a los irreversibles; los recuperables a los irrecuperables; los de aparición periódica a los permanentes; los compatibles con el medio a los críticos… es decir, piensa antes de actuar.

Instala de forma correcta

Instalar es un acto que causa una afección normalmente irreversible. Antes de instalar con las manos, hazlo con la cabeza. Instalar requiere de una ética sólida y una buena observación.

  • Para decidir la vía de instalación de una dificultad, optar por lo siguiente: 1º más segura; 2º menos impactante; 3º más cómoda. Es decir, que clavar dos spits más no sean motivo para manchar para siempre una bonita colada con el barro de tus botas.
  • Las instalaciones de ataque no justifican alteraciones irreversibles o muy impactantes del medio.
  • Procura hacer visibles las instalaciones permanentes, de tal forma que lo que vengan detrás no tengan que volver a instalar.
  • En las escaladas considera también el impacto ambiental como un factor más a la hora de elegir la mejor vía a abrir.

Minimiza el impacto de las desobstrucciones

Para franquear pasos recurres a métodos que van desde quitar barro o tierra hasta romper y retirar bloques o trozos de roca madre.
Las desobstrucciones no sólo suponen una destrucción de la geodiversidad (roca, sedimentos…), con lo que esto puede conllevar de pérdida de información sobre su génesis y evolución, sino que puede provocar daños asociados a la alteración del clima por modificación de la circulación del aire o cambio de cauces. Además puede emitir gases, destruir patrimonio cultural o, simplemente, deportivo (ese bonito paso selectivo y/o complicado).
Realiza las desobstrucciones que estén justificadas, y tras valorar su impacto ambiental, paisajístico, cultural y deportivo. Evita especialmente las alteraciones que cambien el microclima de la cavidad.

  • Antes de realizar una desobstrucción, valora su afección ambiental y cultural.
  • Antes de realizar una desobstrucción, procura que pase alguien, si es posible, para poder valorar si está justificada.
  • Opta por la alternativa que menos impacto produzca.
  • Realiza fotos antes de la desobstrucción
  • No des fuertes golpes ni produzcas vibraciones cuando haya murciélagos en períodos sensibles (cría e hibernación).
  • Deja cerca el material desobstruido, con el menor impacto visual.
  • Las dimensiones máximas del hueco desobstruido serán las necesarias para el paso de una camilla.
  • Tras la desobstrucción, toma las medidas para recuperar la zona en la medida de lo posible.
  • Evita especialmente las actuaciones que alteren el clima: abrir o cerrar bocas, desobstruir u obstruir pasos, interrumpir o alterar cauces…

2. No introduzcas elementos extraños a la cueva

El medio subterráneo es un sistema muy frágil. Las cadenas tróficas se desequilibran fácilmente por la introducción de organismos ajenos o un aporte extraordinario de materia orgánica. Los residuos no desaparecerán, incluso los biodegradables tardarán un tiempo larguísimo en degradarse, si es que llegan a hacerlo, ya que la biomasa de bacterias descomponedoras es ínfima.

No metas en el interior organismos externos ni materia orgánica

Evita introducir organismos extraños a la cueva.

  •  Limpia el material antes de cada actividad: buzo, botas, guantes y sacas.
  • Si tienes las botas sucias de barro, límpialas antes de entrar en zonas limpias y secas.
  • Cuidado al abrir la saca, para no transferir animales, plantas u hongos.
  • El humo del tabaco no es sano para ti, ni para el medio subterráneo. Y llévate contigo las colillas.

No abandones nada orgánico, puede desequilibrar la cadena trófica.

  •  La orina altera la composición del medio e introduce elementos orgánicos, además de generar mal olor.  Si vas a andar fuera de ríos o zonas acuáticas, piensa en orinar en botellas llevadas a tal fin.
  • Los excrementos producen serias afecciones: nuevos gérmenes, alimento para determinada fauna que desequilibra el medio, olores, suciedad y afección visual.
  • No dejes caer comida al suelo cuando comas, ni abandones nada orgánico.
  • Saca al exterior la basura que alguien menos considerado haya abandonado.

Usa el material adecuado: no dejes residuos

Evita dejar rastros, y elimina adecuadamente los residuos. Elige bien el material. El precio no debiera ser el criterio principal: 1º lo más seguro; 2º lo menos impactante; 3º lo más cómodo para ti.

  • Las fibras sintéticas son más adecuadas, pues no se desgarran tan fácilmente y, en el caso de hacerlo, no sirven de alimento a los microorganismos.
  • En la iluminación, tiende a material que sea enérgicamente más eficiente. Y usa baterías recargables: son más ecológicas que las pilas, y a la larga, más baratas.
  • No abandones nunca las pilas en la cueva.
  • Si todavía usas carburo, vete pensando en pasarte a los modernos leds. En cualquier caso, nunca dejes la purga del carburo dentro, ni la arrojes al río: a pesar de haber completado la reacción, el carburo tiene gran cantidad de impurezas metálicas que son altamente contaminantes.
  • Lleva bolsas o sacos duros para sacar al exterior la basura y los excrementos si es necesario.
  • Las botas no deben ser tan blandas como para dejar restos de goma al dejarse resbalar.
  • En cuanto al material de instalación, de entre el más seguro, elige el que menos impacto genere: el que no requieran siempre de taladro (sus gases alteran el medio), sea recuperable, no dañe mucho la roca…

3. Travesías, prácticas, rescates y campamentos respetuosos con el medio

El impacto sobre la cavidad se ve acentuado si se incide repetidamente o durante un periodo prolongado de tiempo, como sucede con los itinerarios muy transitados, las prácticas o los campamentos. Los campamentos concentran un alto impacto en un área muy concreta, así como el acarrear hasta dicho lugar todo el material necesario para instalarlos, por lo que sólo deberán montarse cuando estén debidamente justificados por la dificultad de la exploración. Y las prácticas, si son fuera de la cueva, mejor.

Travesías

Pisa por donde ya esté pisado; utiliza los caminos existentes. Concentra los usos en áreas más adecuadas.

  •  Especialmente en cavidades muy visitadas, utiliza los caminos existentes y concentra los usos. Reducirás el impacto y la posibilidad de pérdida de los que vengan detrás de ti.
  • Apóyate (manos, pies, asientos) en los lugares ya alterados o sucios: evitar manchar más de lo que ya está.
  • Si has de abrir un nuevo camino o instalar una nueva vía, elige las de menor impacto: balízalo y respétalo.
  • Si son zonas vírgenes, valora el camino con menor impacto y señalízalo.
  • Señaliza las superficies que se pueden dañar (polvo cristalizado, por ejemplo).
  • Para balizar, utiliza material biodegradable o que no cree daños añadidos; usa kairns.
  • No pises por todas partes.
  • Deja que las zonas por las que no necesitas transitar se regeneren.

 Prácticas y rescates

Una afluencia excesiva de visitas altera el sistema e impide que se regenere naturalmente ante los impactos. Los rescates son actividades de alto impacto.

  • Las prácticas (progresión, rescate, desobstrucciones…) son muy impactantes: en la medida de lo posible, conviene realizarlas en el exterior, sobre todo en la fase más inicial de la formación.
  • En el rescate de un espeleólogo herido, primará desde luego la vida de las personas; pero se evitarán causar más daños de los necesarios. Las prioridades en la toma de decisión para elegir la mejor vía o forma de evacuar a un herido son: 1º seguridad de todos; 2º rapidez de evacuación; 3º menor impacto en el medio; 4º comodidad de los rescatadores.

 Campamentos

Los campamentos son muy impactantes al medio: evítalos en la medida de lo posible. Móntalos pensando en minimizar los impactos.

  •  Integra la variable ambiental en la toma de la decisión del lugar en el que colocar un campamento subterráneo. Si puedes, reutiliza las zonas de acampada preexistentes.
  • Nunca enciendas fogatas en el interior: los daños son enormes. Procura usar los hornillos en zonas con ventilación.
  • Si el campamento va a durar un tiempo, lo ideal es preparar unas botellas o recipientes donde se depositarán los excrementos para poder sacarlos al exterior. Si no es viable sacar los residuos, prepara unas letrinas, que habrán de tener una profundidad de 15-20cm y situarse lejos de zonas activas, caminos y campamento. Deja una pala cerca para enterrar los excrementos. Por descontado, llévate el papel higiénico.
  • Cuando desmontes el campamento, que no se note que se ha acampado ahí.

4.Respecta el patrimonio natural (bio y geo) y el cultural

Las cuevas albergan una inmensa riqueza cultural, faunística y geológica que no encontrarás o no te será accesible en otros lugares. Sólo actuando de manera adecuada su disfrute y el conocimiento serán compatibles con su conservación a largo plazo. Los restos biológicos (fósiles, restos óseos) y la riqueza geológica, además de hermosos, son una valiosa fuente de información sobre la génesis y evolución de la cavidad y del karst. Es una información UNICA!!! Y es un patrimonio irrepetible!!

Fauna

La fauna de las cuevas es muy sensible, procura no alterarla.

  •  La introducción de cualquier organismo ajeno o de elementos orgánicos alterará el frágil equilibrio de este ecosistema.
  • Las cuevas contienen gran cantidad de endemismos: la destrucción de la fauna de una sola cavidad supone una importante pérdida de biodiversidad.
  • Respeta a los murciélagos, fauna sensible y protegida: no les perturbes, y menos aún en sus épocas de cría e hibernación.
  • No mates ni te lleves nada sin motivos científicos: ni vivos (salamandras, ranas, invertebrados…) ni restos óseos o fósiles.
  • Las entradas de las cuevas son zonas de gran vida y muy delicada: no orines en la entrada o cerca de ella; pasa rápido, no te detengas mucho y evita cambiarte aquí; pasa cuanto antes a las zonas más duras.

 Geología

Respeta los espeleotemas y riqueza geológica de la cavidad.

  • Si puedes, evita tocar las formaciones: puedes romperlas, y la suciedad que dejas puede alterarlas o dañarlas en su crecimiento.
  • No te lleves nada de la cueva: una estalactita es bonita en su contexto. Si la sacas, antes o después, acabará en la basura de tu casa.
  • Una buena fotografía recoge toda la belleza de la cavidad y permite que otros la aprecien.
  • No te lleves los minerales para coleccionismo: son parte de la geodiversidad y pueden dar información del origen de la cueva a la gente que sabe interpretarlos… siempre que los encuentren en su sitio.

 Yacimientos

Respeta los yacimientos y restos arqueológicos, paleontológicos y etnográficos. Son parte de nuestra riqueza cultural.

  • Cuando localices un yacimiento, no lo alteres, balízalo y ponlo en conocimiento inmediato de las autoridades competentes.

La recogida de material científico (huesos, fauna…) se hará con las debidas garantías

Antes de tomar muestras, infórmate de su interés y de cómo hacerlo, ya que una muestra mal recogida puede perder todo su valor.

Si recoges material, responsabilízate de saber su determinación y de que no se pierda ese dato, respetando los derechos de autor, pero dejando registro fehaciente de tu captura. Que la captura o extracción no sea inútil y sólo se haga una vez.

  • No recojas más muestras que las estrictamente necesarias para su categorización.
  • Si se trata de elementos inertes, revisa primero la zona para escoger los que estén ya rotos o los que menor alteración supongan. En caso de sospechar de la existencia de nuevos elementos geológicos (minerales, espeleotemas extraños, etc.) ponte en contacto con especialistas antes de recoger ninguna muestra.Saca fotos antes de la captura o la recogida de muestras.
  • Utiliza una metodología que asegure el buen estado de las muestras recogidas, a costa del mínimo daño.
  • Contacta con especialistas y busca su consejo antes de sacar material al exterior.

Trazados

Los espeleólogos tenemos acceso directo a las redes hidrológicas subterráneas de los macizos, lo que en muchos casos nos convierte en los mejores conocedores del sistema de drenaje del karst. Profundizar en su funcionamiento requiere, en muchos casos, de la realización de trazados que hemos de procurar sean lo menos impactantes posible.

  • Si vas a realizar coloraciones, hazlo con las debidas precauciones e informándote bien del material a utilizar, medios, sistemas… No utilices sistemas de trazado perjudiciales.
  • Es conveniente no utilizar fluoresceína en sistemas de abastecimiento. En estos casos, es mejor utilizar Cloruro de Litio (resulta mucho más caro, y más engorroso de realizar) u otro trazador químico.
  • Ajusta la dosis al máximo para que lo puedas detectar (bien con fluocaptores, analítica directa, …) pero que no llame la atención de todo el mundo. Cuanto menos trazador se introduzca en el sistema mejor. Esto sirve para todos los trazadores pero sobre todo para los colorantes.
  • Si va a salir por un manantial captado, ponlo previamente en conocimiento del abastecedor
  • Es aconsejable que comuniques tus intenciones a Salud Pública y a la Agencia Vasca del Agua a través de una breve memoria explicativa, indicando el interés del trazado, la metodología a utilizar y las precauciones que vas a tomar

5.Sé considerado con otros visitantes

Todos tenemos derecho a disfrutar de las cuevas y el correlativo deber de cuidarlas. Deja la cavidad para los siguientes como te gustaría encontrártela a ti.

  •  No dejes cuerdas o instalaciones en mal estado: retíralas o inutilízalas antes de que sean inseguras.
  • No alteres las señalizaciones ni coloques otras nuevas que puedan resultar confusas.

6.Piensa en la cueva como un elemento dentro de su entorno

No puedes considerar la cueva como un elemento singular aislado de su entorno, como una isla. Debes verla desde una visión holística y considerar que se forma en un sistema más amplio, encuadrado en un macizo y localizado en un área geográfica determinada. En último término, debes tener en consideración a los habitantes de esta zona, a quienes puedes perjudicar con tu presencia… pero también favorecer. Recuerda que las cuevas a menudo se localizan en zonas montañosas, inaccesibles o poco transitadas. La espeleología, como, en su caso, el montañismo o el descenso de barrancos, puede ser fuente de riqueza para zonas deprimidas.

Cuida también el medio ambiente del exterior

  •  Además de respetar el medio epigeo, el flujo de energía entre ambos medios (interior y exterior) es incontestable: el daño que causes fuera repercutirá dentro.

Sé respetuoso con la gente del lugar, sus propiedades y sus costumbres

  •  Respeta la propiedad privada de los terrenos en los que se sitúan las cuevas: pídeles permiso, y respeta sus hábitos y creencias.
  • Deja las puertas de acceso a la cavidad como las encontraste.
  • Respeta las costumbres de los lugares en los que se vaya a practicar la espeleo.
  • Deja el coche en lugares adecuados, que no interrumpa el camino ni altere la vida de los habituales del lugar.
  • Muchas cuevas tienen cursos subterráneos que alimentan manantiales. Con mayor o menor retraso, o factor de dilución, todo lo que viertas al río (carburo, orina, basuras) acabará llegando al agua de boca de los pueblos situados aguas abajo.

 Que tu presencia reporte más beneficios que perjuicios

  • Consume en el lugar donde está la cueva (café, bocata…): fomentarás el avance sostenible de pueblos rurales.
  • Difunde la información y conocimiento que has generado: es patrimonio de todos y pondrás en valor la cueva y el karst.

 No alteres un entorno natural bien conservado

  •  Con un 4×4 no te salgas de pista: erosiona el terreno y deteriora los caminos.
  • Para acceder a la cueva, utiliza los senderos marcados. Si estos no existen, intenta no crear uno nuevo.

En particular, la desobstrucción

La retirada de roca y sedimentos en zonas estrechas está permitiendo, junto con la escalada y el espeleobuceo, alcanzar los mejores y mayores hallazgos exploratorios en la última época. También es precisa para actuaciones de socorro: la Comisión del Socorro de la UEV está impulsando que los espeleosocorristas conozcamos las novedosas técnicas de desobstrucción que serán de inestimable ayuda en el rescate de un compañero herido, sin lugar a dudas prioritario ante cualquier otra cuestión.

Sin embargo, desde aquí queremos llamar la atención en que una serie de medidas que, bien tomadas, pueden reducir los impactos que las desobstrucciones ocasionan. Seguridad y respeto al medio son, indudablemente, compatibles.

Efectivamente, una desobstrucción puede ocasionar importantes afecciones, como son, entre otros, los siguientes:

  • Rotura de concreciones y roca.
  • Alteraciones en el sedimento.
  • Modificación de las corrientes de aire, con cambios en la concentración de CO2 de las salas cerradas a las que se pudiera acceder.
  • Daños al paisaje subterráneo
  • Destrucción de información sobre la cavidad: si se ha formado ahí esa estrechez hacia lugares mucho más amplios, algún motivo debió haber.

Por ello, proponemos que al realizar una desobstrucción se tengan en cuenta las siguientes premisas:

  1. Romper cuando esté justificado. En exploración, si no hay aire, pocas probabilidades de continuación y estamos ante una zona que merecer ser preservada, igual es mejor tomar nota y conservar, renunciando a la exploración.
  2. Evitar alterar mucho el sedimento.
  3. Documentar bien antes de empezar: fotos, topo, corrientes de aire o agua…
  4. Abrir lo justo: el máximo debe ser para permitir el paso de una camilla.
  5. El material retirado se deja cerca.
  6. Cuidar el aspecto final.

Una vez finalizada las desobstrucción y, en su caso, la exploración, devuelve el paso a su situación original lo mejor que puedas.

OTRAS REFERENCIAS

Por su importancia y claridad, traemos aquí dos cartas: la Europea; y la francesa de compromiso por parte de los espeleos franceses.

CARTA EUROPEA DE REFERENCIA

PARA LA PROTECCIÓN DE LAS CAVIDADES Y DEL KARST.

Elaborada por la Comisión de Defensa del Karst (ECPC) de la Federación Europea de Espeleología (FSE)

10 PASOS PARA PROTEGER LAS CAVIDADES Y EL KARST.

Protección, Responsabilidad, Respeto

El reino subterráneo es frágil, vulnerable, tiene una lenta evolución; por ello, cualquier degradación, intervención o actuación inadecuada provoca efectos irreversibles. Proteger una cueva supone conocer y apreciar sus valores; y ser responsable implica ser consciente de que una cueva relata una crónica cultural y natural que debemos proteger y preservar para las generaciones futuras.

Respetar el medio ambiente de las cuevas es respetar la vida. Una manera poco impactante de explorar o visitar una cueva puede hacerse:
1.- Apreciando su belleza natural y sus valores arqueológicos y paleontológicos.
2.- No dejando nada detrás, salvo las huellas de nuestras pisadas.
3.- Usando técnicas de alumbrado respetuosas con el medio.
4.- Manteniéndonos dentro de los senderos o caminos marcados.
5.- Moviéndonos juntos por la cueva como un equipo capacitado con conocimientos suficientes.
6.- No dañando el medio natural y minimizando el riesgo de accidentes en la cueva.
7.- Progresando por la cueva con las técnicas que menos afecten al medio ambiente subterráneo.
8.- Andando por las superficies más duras, minimizando así el impacto, incluso cuando estamos en la cueva para levantar la topografía.
9.- Dejando el menor impacto en el karst y en otros tipos de terrenos que alberguen cuevas. Las cuevas y las zonas kársticas pueden mantener el desarrollo sostenible local.
10.- Convirtiéndose en educadores y promotores de la protección y conservación de las cuevas y el karst.
Disponible (Diciembre 2009) en: http://fsue.org/commission/protection/index_commission.htm)

LA CARTA DE COMPROMISO APROBADA DESDE

LA FEDERACIÓN FRANCESA DE ESPELEOLOGIA.

Aquí se recogen acertada y resumidamente los compromisos que los practicantes de la espeleología debiéramos aceptar al practicar esta actividad.

La espeleología es una actividad al aire libre que se caracteriza por:

• el medio ambiente natural en el que se práctica, lleno de incertidumbre, de cambio y de necesidad de adaptación;
• los viajes, la vida de grupo y contactos con el medio ambiente que causas;
• el compromiso físico que requiere.

La espeleología requiere iniciativa y responsabilidad, implicando el conocimiento y aceptación de los riesgos inherentes al mundo subterráneo. Su práctica no puede ser limitada por una reglamentación estricta que la despojaría de cualquier interés.

La FFS, federación en quien se delega un servicio público, recuerda los principios básicos que la rigen, donde el respeto es la mejor garantía de la libertad de su práctica.

Carta de espeleólogo

Con la Federación Francesa de Espeleología, para vivir la aventura de la espeleología, descubrir el mundo subterráneo, explorarlo, conocerlo, estudiarlo, protegerlo, y avanzar de forma segura, me comprometo a:
1.- Adoptar un comportamiento responsable, discreto y respetuoso con los propietarios, residentes y otros usuarios.
2.- Respetar cualquier acción reguladora relativa a las cavidades, al acceso a las mismas y a su patrimonio, especialmente en el caso de los descubrimientos arqueológicos.
3.- Respetar y hacer respetar, y proteger el medio subterráneo y su entorno.
4.- Informar a la comunidad espeleológica de mis descubrimientos, haciendo públicos los resultados de mi investigación y exploraciones.
5.- Respetar la labor de otros espeleólogos incluida la prioridad de los descubrimientos y trabajos en curso y la propiedad intelectual y moral de las topografías y publicaciones.
6.- Esforzarme en prevenir los accidentes durante la preparación de una exploración, informándome acerca de las condiciones meteorológicas, las características del lugar y del equipo necesario.
7-. Velar por mi propia seguridad y la de los que me acompañan. Renunciar si las condiciones sobrepasan mis capacidades técnicas y / o físicas, o las del grupo.
8.- Aplicar y promover el deber de apoyo y asistencia directa a otros espeleólogos.
Carta adoptada por la Asamblea General de la ECA junio 2, 2002, y disponible (diciembre 2009) en la web de la Federación Francesa de Espeleología: http://ffspeleo.fr/article.php?rub_id=100

Traducción: María Napal.

Para ampliar esta información:

G. Marbach y B. Tourte: «Técnicas de espeleología Alpina» Ed. Desnivel. 2003.

Paul DeBie. SC Avalon. «Protección de las cuevas»
National Speleological Society: «Guide to a Responsible Caving». 2003.

Leave No Trace Dude: «Leave no trace in caves»